Su nombre era María-Melania Kingsland y los amigos la conocían como Mela Muter, fue una pintora polonesa naturalizada francesa en 1902. Nació en Varsovia en el ambiente de una familia judía, culta y adinerada, y vivió gran parte de su vida en París con su marido Michel Mutermilch (escritor y crítico de arte), donde se formó como pintora en la academia Colarossi. Formó parte de una comunidad de artistas polacos de París y participó activamente en la parte cultural y artística de la ciudad. Se decía que “pintaba como un hombre”, ya que su arte normalmente se alejaba de las delicadezas que se suponía que tenían que pintar las mujeres de los años veinte y treinta. Pintaba con realismo, luminoso y vibrante, y fue absorbiendo las tendencias postimpresionistas europeas. 

Estuvo estrechamente vinculada con Cataluña, tanto con Barcelona, donde inauguró la nueva sala de exposiciones Josep Dalmau, en la calle de la Puertaferrisa, donde el año siguiente mostró una exposición colectiva de artistas polacos; como en Girona, donde llegó por primera vez el marzo de 1914. Se instaló en la parte vieja, donde convivía con su amigo y pintor Pedro Farró. Adquirió una gran popularidad en los ambientes artísticos y en su entorno se aglutinaron toda una serie de artistas, con el café Norat de la Rambla como punto de referencia de las tertulias, entre los cuales había Javier Montsalvaje Iglesias, Manolo Hugué y Celso Lagar. Se disolvió en esclatar la Primera Guerra Mundial.

Durante la Segunda Guerra Mundial vivió en Avignon, pero los problemas de vista frenaron su producción. La guerra y el divorcio la dejaron en una situación precaria, sola, marcada por el hecho de ser judía y de haber participado en la causa socialista, y sin conexión con sus orígenes. Al morir a los noventa y un años dejó parte de su obra a una ONG.

Durante su trayectoria, Mela pintó la parte vieja de la ciudad de Gerona, el valle de San Daniel y algunos pueblos del entorno, a parte de numerosas figuras y retratos. Ganó una medalla de oro en la Exposition Universelle de París de 1937 y exposó por todo el mundo. Hay obras suyas en el Museo de Arte de Gerona.